PIENSO, PERO ¿EXISTO?

domingo, 22 de diciembre de 2024

   Cada vez que trato de entender el mundo y sus circunstancias, el hombre y sus contradicciones, la teoría y la realidad, la inteligencia artificial y la inteligencia natural, mi cerebro entra en shock. Hay una especie de desequilibrio natural o  una demencia colectiva en que nada es lo que significa. 

   La Navidad es Paz y Amor. ¿En serio? Vestimos de luces las ciudades, las engalanamos para conjurar el espíritu navideño, pero en realidad no es más que un engañoso producto fruto del consumismo. Como el día de la madre, el de los enamorados, el black Friday o las rebajas de enero. El nacimiento de Cristo, los valores del cristianismo basados en la hermandad y el amor, no son ni realidad virtual, simplemente no existen en esta Navidad. Fariseismo. Jesus nos expulsaría del Templo. 

   Belén sometido bajo las bombas, convertido en un cementerio. Netanyahu como nuestro Herodes moderno ordenando el asesinato de casi cincuenta mil personas, principalmente mujeres y niños. Este es nuestro nuevo portal, el nacimiento con la mula y la vaca son historia, no quedan pastores, están todos muertos y el ángel ha perdido un ala. En Palestina, Cisjordania, Líbano y Siria, la Navidad es un funeral constante. Entretanto nosotros embelesados con los árboles altísimos y luminosos, con su estrella brillando en el cenit. Acalladas las conciencias con el azúcar navideño, acalladas las voces críticas de un nuevo genocidio, un silencio sólo roto por los villancicos: “Hacia Belén va una burra…” Tristeza.

   Nos movemos entre dos mundos, el real y el imaginario. El multiverso y Matrix (la realidad generada por ordenador o por los medios para someternos a la inconsciencia). Somos seres reales, pero creamos identidades falsas para escondernos tras facebook, Instagram o cualquiera de los mundos diversos que nos abren las puertas del mundo. Salimos afuera disfrazados de otros. Somos nosotros y a la vez nuestro personaje, que aparenta, que representa una ficción que no existe. Identidades on line y off line se confunden. El principio “Pienso luego existo” cartesiano, es ya una paradoja. En nuestra existencia paralela existe el ser creado en red. Piensa, pero no existe. Somos sólo conscientes de su existencia cuando los otros lo reconocen, nos representa como lo hacen los sueños, son propios, pero a la vez extracorpóreos, una especie de alienación mental. Incluso en el universo cotidiano y real, acabamos interpretando un papel forzado por las circunstancias. Somos únicamente la superficie, la envoltura, escondiendo el ser pensante tras la negligencia emocional de nuestra posición en el mundo, atrapados en la cárcel de la cotidianidad, no nos queda tiempo para ver más allá de nuestras propias fronteras. 

   Soy cristiano, pero abomino de la Navidad. Sólo la deseo porque son vacaciones. No me gustan los villancicos, ni las luces, ni el empalago de sus falsos mensajes, los Feliz Navidad huecos, los buenos propósitos ficticios. 

   Creo que sólo los niños merecen estos días, no están embrutecidos, la viven desde la ilusión y la emoción, no son responsables de la pervertida versión que hemos creado. Sólo espero que el año nuevo me muestre algún indicio de que estoy equivocado o que la Inteligencia Artifical finalmente se haga dueña de nuestras mentes y nos permita vivir en una falsa realidad, donde todo aquello que soñamos se convierta en una realidad virtual. Si Morfeo me ofreciera las pastillas roja y azul que le mostró a Neo, creo que acabaría cogiendo la azul, empiezo a estar cansado de pensar. En el mundo de Alicia se me han roto los espejos y no quiero bajar a la madriguera. 

   Brindemos por la esperanza perdida, por la esperanza esperada, por la Navidad olvidada y por el nacimiento de una sociedad sin hipocresía.

Matrix | pastilla roja y azul


A L'OMBRA DE LA LLIMERA

sábado, 14 de diciembre de 2024

A l’abuelo 

                  "en ti es de noche" 

                     - Alejandra Pizarnik 

 

La tasca feta, el camp llaurat. 

Tot llum entre els mateixos arbres 

al record de cadascú. 

Abuelo, descansa ara a l’ombra de la llimera, 

aconseguida la teua lluita 

per la que tots ací de nou ens reunim.

 

En tu és de nit. Per primera vegada 

és de nit per a qui a fet viure 

a tots nosaltres sempre de dia. 

En aquesta nit heretem la llum 

que grava en nostra memòria els teus valors, 

el teu sentit comú i les teues idees. 

 

Pare, abuelo i bisabuelo, 

nascut en guerra i crescut en postguerra, 

enllaçat tant anys a l’amor de María 

en el fatigós treball per procurar 

l’educació a la família. 

 

Plorem, sí, perquè en tu és de nit; 

però el record de la teua alegria 

serà sempre motiu de la nostra alegria. 

                                          Andreu Gironés 

 

Jo sé d’un dit que diu: 

“El mon és un mon 

i cada persona, un mon”. 

I també sé d’un dit, el seu, 

que assenyala la terra com 

si fos una rama ferma. 

 

Ací és on sempre ha volgut estar, 

el secà, la caseta. 

Este és el mon senzill, ara silent, 

que ens deixa com herència. 

 

Ací el deixarem estés 

a l’ombra del llimoner 

a sota de l’aliment 

com un pou tendre de cendra. 

I és açò el que li devem, 

el retorn, el record, 

replicar la seua sang, 

la rima eterna. 

                             Robert Gironés

 

CONTRATIEMPO o LA NEGLIGENCIA DEL TIEMPO

domingo, 24 de noviembre de 2024

   Ha sido un gran contratiempo, una imprevisible tormenta perfecta, no quiero quitarle la razón a Mazón. Se juntaron el hambre y las ganas de llover y una serie de circunstancias a cada cual más desatinada. La apretada agenda del presidente y una cita para comer, le impidió estar pendiente de los cielos. Los que sustituyeron a Vox en el control de las emergencias, tenían otras urgencias. Quizá la Copa América, la santificación dels bous al carrer o simplemente no se atrevían a tomar decisiones sin que el capo lo ordenara, porque sus puestos estaban asignados por el dedo de dios, aunque luego se convertirá luego en el dedo acusador. Ellos no sabían, no quisieron ver venir el desastre, porque en esta tierra de fallas y flores nunca antes ha llovido así, o sí. Los expertos fueron ignorados porque eran agoreros, los recursos no utilizados por si se volvían en su contra. 

   Negligencia tras negligencia, fue pasando el tiempo de las pantallas apagadas, de los silencios, mientras las lágrimas de los que eran arrastrados por el agua y el fango se sumaban al torrente de torpezas. Fue un contratiempo porque confabularon contra el tiempo, para parar la catástrofe cerraron los ojos y pidieron muy fuerte: ¡Que pare hasta que venga el President! (como en el milagro de Tentudia). Y la cobertura no llegaba al Ventorro, la comida dio paso a una confortable tertulia de sobremesa, ajeno a las alertas, sorbiendo lentamente el chupito pasaron las horas. 

   Quiero imaginar que cuando por fin salió a la calle y descubrió las llamadas pérdidas, tras recuperar la cobertura, tras subirse al coche y ver que un tráfico inusual le daba la bienvenida, todavía bajo el sopor del postpandrio, debió sentir una punzada en el estómago. ¿Qué pasa aquí? ¿No pueden estar sin mí ni cinco horas, sin montar un escándalo? Pero conforme se acercaba al Cecopi, con el manos libres del smart phone de última generación, presintió la catástrofe. Todo lo que le contaban no tenía sentido, como se iban a desbordar los barrancos, eso sólo sucedía en los gobiernos del Botánic, aquellos gobiernos Frankestein que amaban las tormentas. Como ocurrió en la Vega Baja en 2019, donde él puso en evidencia la inoperancia de los gobernantes. La pesadilla se convirtió en horror, entradas las 20 h y por fin activó el botón del pánico, la alerta que les sonó a muchos ya bajo el agua. ¡Que gran contratiempo! 

   Cuando las aguas ya habían anegado los campos, las casas, las calles e inundaban los sótanos, vino la paz y el silencio de los muertos. Todos mirábamos atónitos las pantallas y nadie entendía como había podido pasar y como en un abrir y cerrar los ojos no se llenaba de militares una zona de guerra para salvar a las víctimas de la negligencia. La solución no puede ser un ejército aerotrasportado de despliegue inmediato. La solución es la prevención. La responsabilidad de evitar construir en las zonas inundables, de retirar los barrancos que circulan por mitad de las poblaciones, de atender las llamadas de los que advierten del futuro de agua y sed, de sequía y torrenteras que nos hemos dado, pero eso es muy complicado. 

   Cuando pasaron los primeros días de shock, con las piernas acalambradas y cabizbajo, se dijo a sí mismo: ¡Reacciona! y desde otras instancias le decían: ¡Reacciona! Que significa: busca un culpable para todo este desastre. Tanto da que sea la CHJ como la AEMET, con tal de que no nos manche el barro nos sirve cualquiera, el gobierno, los militares, la cruz roja, apunta y dispara. Destituye a los ineptos, pero poco a poco, ganando tiempo. ¡Nuria, Salomé sed fuertes! Y ahora con la casaca puesta y las botas de agua ponte a reconstruir. Toma las riendas de la reconquista como don Pelayo, rodeado de paladines en magníficos corceles y con la solapa llena de medallas, promete una tierra futura llena de flores. 

   Las lágrimas harán florecer el desierto y el trabajo de los hombres y mujeres que se aplicarán en devolver la luz a esta tierra, pero tú ya no cabes en este proyecto. Tú eres el responsable y debes irte lejos porque tu sombra hace que el barro no desaparezca.

https://youtu.be/dnZj7EinXe4?si=692Fg4dTofPAk-ST

MANESKIN . ZITTI E BUONI 

SIN TRUMP AS NI MAZON

viernes, 15 de noviembre de 2024

   La realidad es la que es. Por más que nos empeñemos en creer que es imposible que un idiota puede alcanzar las más altas cotas de poder, los hechos nos desmienten y nos dan un guantazo con la mano abierta. Piensas, en un país que es un gigante económico y científico, que su líder pueda ser un psicópata es una distopía imposible. Que ese energúmeno nombre como director de la sanidad a un antivacunas, en justicia a un delincuente o como financiero mayor del reino, para eliminar los gastos superfluos, al hombre más rico del mundo es coherente, pero grotesco. Todo parece un vodevil absurdo del teatro de Ionesco, un estrafalario esperpento salido del producto de una intoxicación por LSD, pero no, es la realidad. 

   Si la Inteligencia Artificial, los medios, los bulos, las campañas de intoxicación han podido abducir a los votantes, no hace más que confirmar que la democracia está acabada. Si los que votan son analfacríticos, si son incapaces de masticar la información y digerirla por sí mismos, el futuro es un probable abismo. Esa obscena realidad la aplauden los amorales: Netanyahu, Putin... hacen palmas con las orejas. Si hasta ahora han sido impunes y se les ha permitido cometer los más atroces atentados contra la dignidad humana, ahora el espectáculo puede ser un circo a cinco pistas. La COP29 en Bakú para discutir el cambio climático, no es un síntoma, en un cuadro séptico terminal. Definitivamente no hay cura, tenemos los días contados. Al menos se venderán más coches eléctricos de Tesla, objetivo sin duda procurar el bien de la Humanidad, no el negocio de Elon. 

   Puede parecer que los tarados están lejos, pero no, conviven como zombis entre nosotros. Un incompetente negligente como Mazón es nuestro presidente. Él y sus adláteres pretenden convencernos que desde el malvado Averno la AEMET y la CHJ se conjuraron para con silencios cómplices, no avisarles de que el diluvio universal se cernía sobre nosotros. La falta de cobertura en el restaurante o el Ventorro que no dejaba oír nada, impidió que el presidente levantara el culo de la silla. Si dijera que nunca he visto tanta desvergüenza mentiría porque están calcando sus anteriores descalabros, el 11M, el Yak 42, el Prestige, la corrupción llevada a su máxima expresión, los 7291 ancianos muertos en residencias y como no, el accidente del metro de Valencia. Como Monica Oltra decía: "En el PP son más peligrosos por ineptos que por corruptos" y de lo segundo han ido sobrados. 

   La culpa siempre vive afuera, todo ello fue inevitable, inimputable a la ineptitud de personas que ostentan poderes que no controlan. Le ha faltado decir a Mazón que se tenían que morir igual. No es que atraigan el mal, ni que lo provoquen a sabiendas, es simplemente que son incapaces, porque su ascenso no se debió a ese mantra que repiten de la meritocracia, sino simplemente a la lametrocracia, la propaganda y los intereses. Ahora como entonces, la estrategia es la mentira repetida y amplificada, el reparto de culpas, el desvío de la mirada hacia otros objetivos y por supuesto la promesa de que la próxima lo van a hacer bien. La falta de humildad, la ausencia de escrúpulos con más de doscientos muertos y miles de familias arruinadas provocan una rabia, una desesperante sensación de impotencia contra la insidia. Si no somos capaces de reconocer que estos individuos nunca nos sacarán del lodo, que nos meterán una y otra vez en el fango y nos revolcarán en la miseria mientras comen y beben pagando con la Visa Oro, estamos perdidos. 

   La esperanza es que el pasado sábado más de 130.000 voces gritaron: Mazón dimisión y a prisión. Después de escucharle en les Corts, espero que convoquen otra para salir de nuevo a gritarle que desaparezcan de una vez por todas, porque el daño que han provocado es demasiado grande para soportar su presencia.

SENTIMIENTOS ENCONTRADOS

miércoles, 6 de noviembre de 2024

    Siento rabia, indignación y pena por la desgracia enorme que nos ha venido del cielo. Esas aguas turbulentas que bajaron en tromba provocaron tanta desolación en la gente, que mi corazón se siente también desolado. En contrapartida siento orgullo y emoción al ver la respuesta de miles de jóvenes. La generación de cristal no parece que es tan egoísta, no está tan poseída por los móviles como podíamos pensar. Las redes los movieron, fueron una riada benigna de solidaridad y generosidad. 

   Siento perplejidad, desilusión, desconfianza por los responsables que ignoraron por ineptitud o por desidia las señales de la catástrofe que tan bien les marcaron la ciencia. Por ellos siento un desprecio enorme porque carecen de la dignidad y la humildad para reconocer su error, para dimitir y pedir perdón a las víctimas. Pero a la vez se despierta mi orgullo cuando veo de lo que somos capaces para restablecer lo destruido. Demasiado lento para los afectados, con retraso, pero con entrega: voluntarios, bomberos, UME, policía, guardia civil, militares se han dejado las manos en la tarea de recomponer el roto que la Naturaleza contrariada ha provocado. Devolver parte de la calma al caos. 

   Me avergüenzo de la violencia que alimentan los que odian aprovechando la frustración de los que todo lo perdieron. Me producen nauseas los que roban a los desposeídos, los que arrojan bulos interesados para ganar audiencia y dinero, los que mienten por interés político. Toda esa escoria me hace tener dudas sobre la naturaleza humana y la maldad que es capaz de expresar. Pero me reconforta ver voluntarios venidos de todo el país, ver gente de campo con sus tractores, escuchar mensajes de verdadera solidaridad y de dolor compartido con los afectados. 

   Sigo pegado a la pantalla, hipnotizado, contemplando el desastre con una mezcla de dolor y gratitud, de frustración y esperanza. Seguimos en shock por los muertos, por las imágenes que se parecen a una zona de guerra. Me asaltan las dudas de si al final se olvidará el mensaje que lanzó la lluvia. Si como en otras ocasiones todo acabará en un mal recuerdo, en una fecha señalada por la desgracia. Cuando recompongamos las casas, las calles (las almas de los que han perdido a su familia nunca se recuperará), cuando podamos ver de nuevo el sol y el ajetreo en lo que ahora el un erial de barro, ¿Seremos capaces de recordar que este sólo ha sido un aviso? ¿Seremos suficientemente maduros para ser críticos con los que prometen que lo público puede abaratarse sin costes? Esa es la gran prueba que nos espera, si en este tumulto de sentimientos encontrados, sabremos encontrar la salida que nos permita luchar para que no se repita. 

   Me debato entre la evidencia de los hechos y la duda de si hemos sabido entenderlos. Sentimientos encontrados. 

Al meu pais la pluja. Raimon.

El fang, la pluja, el fang, els carrers plens de fang,

l'aigua, l’aigua caient, a dolls, de les teulades;

els carrers plens de fang, les sabates amb fang, la boira,

el caseriu i l'esgarrany d'un arbre.

El fang, la pluja, el fang, unes coses humides.

 

He vist coses. Finestres, i genolls, i cistelles,

i ascensors, i prospectes, i he vist la sang dels parts

(i l'he sentida caure brutalment al poal),

i he vist mercats, i grills, i claustres, i telèfons,

i avets, i pèls suats, i gavines, i llànties.

He plorat molt. He vist coses. He plorat molt.

Vicent Andrés Estellés,  Llibre d'Exilis (1971)

 

IDUS DE MARZO

sábado, 26 de octubre de 2024

    No es Errejón un César, ni se ha cometido un asesinato, ni siquiera estamos en marzo, pero imagino en la Roma Imperial los grafitis, como aquí en los telediarios y los periódicos. Noticia de primera plana, comentarios, opiniones… 

   "El Senado se abalanza sobre el tirano clavando sus puñales. Al ídolo caído ninguna clemencia le espera, una daga se clava en su costado, un puñal en el corazón, incluso algún gladio secciona la yugular expuesta. Yace el maldito sobre un charco de sangre que es la sangre redentora, la que expía los pecados de todos. “Tu quoque fili mi?” se pregunta mientras su cuerpo se precipita en el abismo de la oscuridad eterna. Mis amigos se abalanzan contra mi, piensa con los ojos abiertos detrás de las gafas de intelectual, mientras cae derrotado". 

   Esto es la noticia, pero en la base de todo existe un hecho, un comportamiento tan sucio y con tanto hedor, que no despierta el más mínimo sentimiento de compasión. 

   Entre aquellos que empuñan todavía el puñal sangrante, manchando sus blancas túnicas romanas, algunos aprovechan para reclamarse como garantes de la defensa del verdadero credo y otros reprochan la mentira que defendía el finado. En el senado romano ahora tan excitado por el golpe, no hay un compromiso total para erradicar el mal. Demasiado postureo y conveniencia. Demasiada tolerancia con los precedentes. Es una oportunidad, pero ya hubo otras antes.

   Errejón será el responsable de todo lo que ocurra. Un hombre inteligente no puede esconderse en los jeroglíficos verbales de la duplicidad persona/personaje. No cabe pensar en un Dr. Jekyll y Mr. Hide postmoderno, neoliberal y patriarcal, eso son escusas de mal pagador. Cada cual tiene sus propios demonios, pero ante un hecho tan grave, que sabe que ha perjudicado a terceros, la primera reflexión debe hacerse desde la petición de perdón, no de comprensión. No es necesario practicar un haraquiri público, pero no es suficiente esgrimir la justificación en lugar del arrepentimiento. No le puede servir de coartada. 

   Su discurso brillante tantas veces escuchado, su apología en la defensa de lo que ha traicionado de forma tan flagrante, es un agravante que no puede eximirle, a pesar de los atenuantes que pueda legítimamente esgrimir. Esa disparidad entre su teoría y la práctica le desacredita como referente, si no es como referente de la hipocresía. No vuelve falso su relato, no dejan de ser veraces los principios que defendía. Sólo él deja de ser creíble.

   La verdadera cuestión, es que el delito no depende de quien lo comete sino del delito en sí. Errejón no es el primero, ni será el último, pero como sociedad tenemos que aprender a tener una tolerancia cero contra la agresión a los otros. Me produce repugnancia escuchar lecciones de moral, tanto de la izquierda como de la derecha. Dejen de lamentarse o de utilizar la ventaja política que da el delito. Hay que actuar y aislar a los violentos, denunciar la obscenidad de su comportamiento. Debe haber asunción de responsabilidades por la propia regeneración de la sociedad, no por rédito político. 

   Nebenka, Giselle son ejemplos actuales que deberían ser suficientes para expulsar de la sociedad a los agresores. Tipos como Trump, Pellicot, nos demuestran que la tolerancia crea monstruos, tenemos que erradicar estas actitudes, por el bien de las mujeres, por el bien de los hombres, por la salud de la sociedad. 

   Íñigo tendrá que asumir las consecuencias de sus actos, Roma no paga a traidores.

 

TODO ES VERDAD

sábado, 19 de octubre de 2024

   Ahora que nos hemos instalado en un mundo de bulos, fantasías creadas por la IA y mentiras intencionadas, yo he empezado a creer en la Verdad. Hay más verdad de la que parece, pero como los hongos en el monte esta oculta bajo las pinochas, semienterrada en el humus, hay que destaparla, pero está ahí. 

   Fíjate si no era verdad lo que defendía Zaplana en las grabaciones del caso Naseiro donde afirmaba que: “él estaba en política para forrarse”. Hemos tardado veinte años en confirmarlo, porque la Justicia sólo corre cuando es necesario, pero acaban de nombrarlo delincuente. Aún no es firme, afirman sus compañeros de viaje, pero en 10 años más a lo sumo, se hará patente. Quizá entonces sea también verdad lo que afirmaba su oncólogo, que se estaba muriendo de leucemia para sacarlo de la cárcel. Espero que no, y que pueda para entonces disfrutar de las tardes soleadas del patio de Picassent. Pedir que devuelva el dinero ya no es una aspiración plausible. 

   Todo es verdad, que a Ayuso le gusta la fruta y disfruta con ella, seguro. Le gusta la bronca como a otros les puede gustar el diálogo, le gusta el insulto porque es su verdad contra los argumentos. Podemos ir viendo como de la A a la Z (no sabía que Zapatero estaba imputado) hay evidencias de corrupción, que lejos de estar en su entorno, viven en el de los otros. Que su novio (y antes su hermano) consiguiera una legitima comisión de dos millones de euros por mascarillas no es más que una verdad sin valor acusatorio y él mismo apela a la verdad reconociendo su fraude a Hacienda. ¿Quién dice que miente? 

   Tampoco miente el Tribunal Superior cuando investiga la filtración del mail secreto que sólo comparten unas 50 personas, ¿Quién puede dudar de que uno de los filtradores pueda ser el Fiscal General del Estado a las órdenes del Gobierno? 

   ¿Acaso los ataques de sinceridad deben ser penados con el descrédito? Casado bien sabe que nada hay tan práctico como esgrimir la veracidad como argumento y plantear la duda de si es legítimo enriquecerse con el mal ajeno para permitirle una salida honrosa de su partido. Que con un mal tropiezo cayera por la ventana de Génova, sólo forma parte de las contrariedades de la vida misma. 

   Si la verdad tuviera un adalid indiscutible, este sería sin duda JM Aznar que vio con claridad las armas de destrucción masiva y la participación de ETA en el 11M. Un hombre clarividente que, aunque no acertara con su verdad, nunca bajó al fango de la disculpa, porque en su imaginario seguía siendo cierto por el mero hecho de haber sido pronunciado por él mismo. Aún sigue ofreciéndonos verdades futuras en forma de augurios y profecías que nos anuncian el irremisible fin de la civilización fuera del Orden que predica. Ofrece a la par un críptico oráculo: “el que pueda hacer que haga” que hagiógrafos y exégetas han interpretado perfectamente. La verdad cuando emana directamente de las fuentes sagradas es fácilmente detectable. Sin ir más lejos el propio Miguel Tellado en su incansable lucha contra la falsedad y sus consecuencias, siguiendo la anterior consigna, afirma con una veracidad intachable: “Nuestra obligación en estos momentos es echar a Sánchez del Gobierno, acabar lo antes posible, y lo vamos a hacer con todos los medios a nuestro alcance y si los medios son judiciales, también lo vamos a hacer” 

   Hasta el Emérito ha venido aclarar las dudas sobre su borbonidad al frente de la Corona. Las grabaciones son francas y entendibles para el pueblo llano. Conversaciones coloquiales y campechanas al nivel de su contertulia, que permiten verificar esos misterios que nunca existieron, porque era una verdad oculta a voces. 

   La política es de todas las artes la más veraz, la más virtuosa de las actividades públicas y está sin duda repleta de ejemplos. Si precisan mentir, siempre lo harán por una buena causa, sea el partido, ellos mismos o la patria que es el más noble de los conceptos que se pueda defender. 

   ¿Quieren más pruebas de que la Verdad está más presente que el engaño en nuestras vidas, que los bulos son sólo un espejismo con el que pretenden asustarnos? 

   El único escalón superior, es la veracidad emanada desde la autoridad judicial, sus sentencias, sus autos, son la “verdad judicial” que es tanto como decir la Verdad Absoluta. Tanto más cuanto más alto sea el Tribunal de la que emanen. Ellos se rigen por el axioma de la imparcialidad total. La Audiencia Nacional dice en sus sentencias verdades como puños tachando al PP de organización criminal, asociación ilícita y delitos electorales. 

   Podemos vivir tranquilos porque sin duda alguna la Justicia obra con absoluta equidad y con los ojos cerrados. “Todos somos iguales ante la Ley” 

   No hay mayor Verdad. 

   Eso y que Dios es Uno y Trino.

El lobito bueno, de José Agustín Goytisolo

Érase una vez
un lobito bueno
al que maltrataban
todos los corderos.
Y había también
un príncipe malo,
una bruja hermosa
y un pirata honrado.
Todas estas cosas
había una vez.
Cuando yo soñaba
un mundo al revés.
 
 
 

EL TIEMPO DE LA IRA

miércoles, 2 de octubre de 2024

   Es el tiempo de la ira y la sinrazón. Se ha perdido ya toda esperanza de que la templanza se alce vencedora. Hemos sucumbido, quizás desde hace ya muchos siglos, a esta locura colectiva, hemos aceptado el fracaso de la concordia, por fatiga, por hastío o por indiferencia. 

   Inventamos conceptos como la Democracia, la Paz, los Derechos Humanos, pusimos en ellos la esperanza de un Nuevo Mundo, pero los hemos pervertido. Ni siquiera Occidente que creía haber nacido para proteger la Razón, que venía a salvar a los Hombres de la barbarie que decían representaba Oriente, ha tenido la mínima decencia en mantener las apariencias ante el oprobio. Desde el otro lado del mundo, no se ven tampoco indicios de pudor alguno para rescatar a la Humanidad de la miseria, ni de la sumisión. 

   Estamos definitivamente perdidos. No hemos aprendido nada. Repetimos la Historia, renovamos las desgracias de los pobres, las víctimas vuelven a ser víctimas y los victimarios escapan siempre sin castigo. 

   Bomba tras bomba, muerto sobre muerto, acumulamos cadaveres que abonan la Tierra. Son el humus del planeta, su sangre lo riega y las conciencias siguen ignorando el triste destino que compartiremos. 

   Mantenemos las bocas cerradas ante la ignominia, hueros de vergüenza, instalados en la propia cárcel de nuestro interés, vamos contemplando como iluminan la noche los cohetes que caen y destruyen lo que nunca podrá ser recuperado. Nadie devolvera la vida a los miles de niños palestinos, nadie reparará las heridas de tanto sufrimiento, nadie podrá resarcir el daño que vemos en las pantallas, los cayucos siniestrados, los muertos de hambre en el mundo, los esclavizados por la maldad. Ignorantes convencidos de que lo que no es noticia no existe, nos eximimos de la culpa de las desgracias ocultas a la actualidad. La Justicia Universal permanece ciega ante los agravios. El descrédito es ya una palabra vacía, no hay Institución que mantenga la dignidad. Pequeñas escaramuzas de activistas, de soñadores, de libertarios, de hombres y mujeres que siguen creyendo que el cambio es posible, luchan y se estrellan contra el Poder institucionalizado, contra el poder del dinero y el poder de la ideología. 

   No hay vuelta atrás, el mecanismo de la maldad ha ido retroalimentando el odio y nunca parará, un perpetuo mobile que movera por siempre los resortes de la inmoralidad. La muerte es el titiritero que mueve nuestros hilos y será la parca la que los corte cuando se canse de los muñecos de trapo, sin conciencia, ni hálito vital. 

   No es pesimismo, es pura conciencia de la derrota, es el triste reconocimiento de que el mundo desvaría. Los locos se sientan los mandos de la nave, manejan los bombarderos y las bolsas, ellos creen que están a salvo en sus bunkeres, en sus mansiones con piscina, pero tanta abominación no quedará sin perdón, tampoco para ellos. 

   Me gustaría cerrar los ojos y que al abrirlos se tratara de un mal sueño. Me gustaría cerrar los puños y que al golpear la mesa se rompiera el tablero de los maquiavelos y cayeran como piezas del ajedrez al abismo del olvido. Pero ni los ojos cerrados, ni los puños prietos pueden destruir este maleficio. Sólo la palabra, la saliva de miles de dormidos puede parar el incendio devastador que provoca la soberbia, la avaricia, la lujuria y la gula, la envidia y la ira creciente, pero sobre todo la pereza del hombre satisfecho.

LA MEMÒRIA TÉRBOLA

domingo, 15 de septiembre de 2024

   Soc un home que ha perdut la seua memòria, potser mai la vaig tindre bé, potser els anys l’han anat arrossegant com un cuc les fulles de morera. Els records van quedant-se com si foren l’últim gemec d’un malalt que agonitza i sols es pot sentir a cau d’orella. Soc un home sense arrels o si de cas, amb unes arrels poregoses que mai s’enfonsaren en la terra. He perdut la memòria i no sé escriure en la meua llengua, estic desmemoriat i avergonyit perquè cada dia els records es fan més foscos, més estranys, com si pertanyeren a un altre que no soc jo o millor dit, al jo que era abans, al que era de menut. Només eixos records es queden en mi.

   Mon pare va morir el 7 d’abril, però pareix que han passat anys. No puc recordar-lo com era, quasi no puc sentir la seua veu, estic perdent-la i en fa por. Recorde perfectament quan anàvem en la moto, una Ducati 50, els caps de setmana, a espigolar ametles, assegut davant al depòsit, encontràvem un niuet i cridàvem: “pelaes o peludes?” i réiem i tornàvem a casa en mig sac, fent cantar el motor de la moto amb el nostre cant. Tinc present com si fora ahir mateix els matins a l'horta del Llombo, on anàvem a traure pedra o a aclarir les bresquilleres i algun matí, ell i els veïns de bancal m’enviaven per cervesa i quan tornava, mentre que ells bevien jo escoltava les seues històries. “Xiquet ves a per un altra cervesa” Tot això puc recordar-ho, però no recorde la seua veu. Sí puc sentir les paraules i els acudits mil vegades repetits ("En un cau de conills el que fan els pares fan els fills") , les històries de la família, el seu orgull d'haver construït una, des de la misèria, des de zero, les tres finques que anomenà quan ja estava morint-se, però el so del seu parlar en resulta llunyà. Veig fins i tot la seua imatge un poc emboirada, amb les arrugues de vell i de llaurador, puc vore’l amb la boina negra, però ja quasi mai pense amb ell, oblide pensar-lo, he oblidat el so de la seua veu, potser un poc ronca, però no estic segur. Soc un home a qui la memòria li fa aigües, aigües térboles, tremoloses, enfosquides on s’enfonsen els records més volguts i no té remei.

   La tardor de la vida fa que perdem els records per a començar a ser recordats.


LAS REPOSICIONES DEL VERANO

sábado, 31 de agosto de 2024

   Como en el cine y la televisión, en la política durante el verano sólo hay reposiciones, pocos estrenos. 

   “La llamada de la selva” Basada en la novela de Jack London y como protagonista al inimitable Clark Gable.

   Sinopsis: cada verano cuando la manada de políticos emprende el periodo vacacional y disfrutan del sol y las tumbonas, decae la actividad parlamentaria, pero como no puede bajar la presión en la olla política, se retoman conceptos antiguos y se reabren viejas heridas para avivar el fuego. El "efecto llamada" es muy eficaz. La invasión alienígena podría ser una estrategia, pero para que, si tenemos los cayucos y pateras, mejor hacer apología de la invasión de los bárbaros: negros y moros sin distinción alguna. Personajes que acuden a nuestro paraíso para destruirlo, asesinos, delincuentes en potencia, una ralea de individuos de baja estofa y pelaje oscuro que sin duda pugna por la sustitución del hombre blanco del que no nos queda más que el recuerdo, porque somos la mezcla de civilizaciones antiguas, invasores, colonizadores, emigrantes, inmigrantes, somos más moros que cristianos, pero pretenden ilusionarnos con la pureza de la raza. A los que vienen de afuera yo los veo trabajando en el campo a pleno sol, cuidando ancianos de día y de noche, contratados con buenos y malos contratos por españoles muy españoles, seguramente algunos votantes de Vox, Alvises y PP, también por socialistas y podemitas. El “efecto llamada” es la consigna, ya lo esgrimieron antes otros fascistas. Deportaciones masivas, la armada invencible para destruir pateras y otras soluciones imaginativas se despliegan a lo largo del estío para que no dejemos que el calor sea más insoportable que estos argumentos. Menos mal que finalmente la fiebre del mono no ha entrado con fuerza porque alguna iluminada, antes public manager de un perro, quería cerrar fronteras.

   Sin duda elegiría “Cuando ruge la marabunta” con Charlton Heston para ilustrar el tema. 

   “Esta casa es una ruina” con Tom Hanks es un clásico que viene en proyección continua desde la moción de censura, hace más de un lustro pero en verano es más insoportable por el calor, como el eccema o la diarrea. 

   Sinopsis: Siguiendo las predicciones de Nostradamus, los augures del PP: Casado y Feijoo y sus adláteres (Teodoro y Tellado, Cuca vale para los dos) van enumerando los terribles males que nos depara la venida del anticristo en la persona de Pedro. La pandemia con la consiguiente extinción de la raza española (casi lo consiguen en las residencias de Madrid), íbamos a acabar de vacunar a la población en 2050, aunque en realidad las vacunas no estaba claro si servían, el timo de la excepción ibérica enriquecía solo las arcas de Francia (a nosotros que no podemos ver a los gabachos), los fondos europeos no iban a llegar por la mala gestión, la nueva reforma laboral y el aumento del salario mínimo sin duda acabarían con el empleo (A ello se sumaba el Banco de España que posee tan maravillosos estadistas como los de Tezanos), la destrucción del Estado, la inflación, el paro, la destrucción de la familia, la desaparición de la reserva espiritual cristiana con el laicismo impío, es decir acabaríamos un día de estos en la Nada, salvo si reflexionábamos y votábamos como toca o destituimos al caudillo. 

   Con permiso de Tom Hanks y mi respeto, para ciencia ficción me quedo mejor con Blade Runner: “He visto cosas que vosotros no os creeríais. Naves de ataque en llamas más allá del cinturón de Orión. He visto RayosC brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhaüser. Todos esos momentos se perderán en el tiempo, como lágrimas en la lluvia. Es hora de morir”. 

   “Doce hombres sin piedad” es otro clásico. Otro gallo nos cantaría con Henry Fonda al frente del CGPJ para conseguir darle dignidad. 

   Sinopsis: Después de 10 años sentados en la poltrona, 5 de ellos con fecha de caducidad agotada. La élite de la magistratura nos sigue amenizando verano tras verano y también en invierno y primavera con sus resoluciones y providencias. Sus majestades togadas nos ofrecen un espectáculo al más puro estilo de Bollywood, sin reparar en gastos ni en vergüenza, sin reparar en argumentos jurídicos más o menos  ininteligibles pero convenientes. Desde el procés a la pureza de la mujer del Cesar, nos adoctrinan en la honestidad y la rectitud. Sin sonrojo perdonaron delitos fiscales como la amnistía fiscal o al  rey emérito, excarcelaron corruptos confesos o probados, condenaron inocentes que ahora exculpan (un poco tarde, pero los tiempos de la Justicia no son los de los mortales). Es la hora de hacer,  que España no se rompa y no pierda la esencia. Probablemente necesiten otros cinco años para elegir presidente (cómo elegir una presidenta progresista, eso sería ceder ante el chantaje socialcomunista). Pronto es la inauguración del nuevo curso judicial y se pronunciarán discursos magníficos sobre la rectitud de la Justicia, su honorabilidad, su equidad, una justicia que es igual para todos (pronunciado tras beber un sorbo de agua para pasarlo). Serios los semblantes, mirando al cielo para que acabe, ese nutrido grupo de hombres notables mostrará el camino de la Ley para más tarde limpiarse con el papel usado. 

   Me quedo con “Toda la verdad” de Keanu Reeves o "Matar a un ruiseñor" basada en la novela de Harper Lee con Gregory Peck, hace entender lo complejo del arte de juzgar, pero lo reconfortante que es defender la libertad del individuo que permite la verdadera Democracia. Sólo los juristas pueden y deben ser los garantes de la Libertad contra los autócaratas. Marco Tulio Cicerón pagó con su vida la defensa de la República romana ante el triunvirato: “Que otros pueblos vivan, si es su deseo en la esclavitud. Nosotros los romanos, no queremos. Si no podemos conquistar la libertad, dejadnos morir” Filípicas. Tomen nota magistrados.

   Y para acabar nos queda “Casablanca” con Humphrey Bogart e Ingrid Bergman. El clásico de los clásicos y que este año ha venido con nuevas versiones en el duelo Trump vs Biden y la incorporación de la estrella naciente de Kamala Harris. 

   Breve sinopsis: el mundo está loco ya lo decía Brian, pero en un año la locura apostó por otro loco portando su bandera. Las guerras siguieron siendo un pecado, no hizo que los ricos fueran más pobres ni que los pobres llegaran al cielo de los ricos. Llegó un día que había que cambiar el portador del estandarte y tomaron un nuevo líder que sucumbió bajo el peso de la bandera y la vejez. Cuando ya parecía que de nuevo el caos estaba a las puertas del Capitolio hubo un destello fugaz que surgió en el firmamento de la bandera estrellada (no la estelada, esa es otra película). Será lo que deba ser, pero los pobres seguirán siendo pobres, los ricos se harán multimillonarios y los judíos seguirán asesinando niños palestinos. 

   Por eso sin duda yo prefiero “La vida de Brian”


LA VIDA DE BRIAN. Escena de Pijus Magnificus

¿HUELE A PODRIDO?

miércoles, 14 de agosto de 2024

   Yo creía que el Covid me dejaría sin olfato y creo que me ha excitado las pituitarias. Cada día percibo más olores con sus matices y emociones. Es posible, que como voy perdiendo vista y oído, los demás sentidos se agudizan. Desgraciadamente, el sentido común creo que no forma parte de este juego de ganancias y pérdidas, para mí que cuando alcanzas a los 40 ya no se mueve, si acaso mengua. 

   Como decía, vengo percibiendo continuamente señales olorosas que me remueven el pensamiento. De los telediarios emanan los aromas más variados e inspiradores. 

   Lo de Puigdemont es una sutil fragancia que huele a caspa y a  perfume rancio que recuerda a la burguesía decadente, a colonia barata y vodevil, pero más allá del hastío que me produce, no mueve tormentas en mi ánimo. Además oyendo los noticiarios, me viene siempre una pregunta, ¿Porqué a los Mossos (con o) les llaman mosus? Puestos a cambiarles el nombre les pondría “mozos”. 

    A su alrededor sí que percibo el olor intenso de la naftalina y la ropa recién planchada, las togas puestas a secar y las puñetas almidonadas, un olor que sugiere orden y limpieza, pero rememora el cine en blanco y negro. Cuando la naftalina se mete en las fosas nasales, tiene un olor acre y desagradable, surgen del recuerdo los juicios sumarísimos y las ejecuciones, menos mal que está la Ley. 

   Lo que si me revuelve las tripas es el hedor del fascismo que nos rodea. Trato de mover la cabeza, pero allá donde huelo percibo la podredumbre de las ideas muertas, de los muertos mal enterrados, de los estafadores de la falsa libertad, de los patriotas de mierda. No sólo percibo la roña que nos secuestró durante años, veo la brutalidad en los actos y en las palabras. En los nuestros, en los de nuestros vecinos ingleses, franceses, alemanes... Me aterra lo envalentonados que están, han perdido el miedo y presumen de fascismo, es más diría que compiten por quien la tiene más gamada. La pestilencia de sus actos y sus acusaciones fake me producen arcadas. No puedo contener la rabia y la impotencia ante una sociedad plegándose a tamaños bárbaros. 

  Hay un olor que siempre he tenido metido en el bulbo olfatorio, el olor a sangre, ahora se potencia con el de la pólvora y el polvo en suspensión de los bombardeos. Trato de aspirar profundo y cerrar los ojos para ver si se me pasa, pero no oigo el rumor de la esperanza, sólo mis acúfenos. No escucho los gritos de los líderes defendiendo la vida, unos callan, otros hacen pequeños aspavientos que no ventilan el aire viciado del mal, diría que huele a azufre, como si el demonio hubiese bajado al mundo y el Fin de los Tiempos se avecinara esperando la parusía en forma de condena al genocidio. 

   El olor a sal, a mar, a viento en la frente, no sólo no me produce placer, ahora me ahoga como si naufragara y me trae el olor del mar profundo. Siento la sed, el sol cayendo a plomo sobre la piel, imagino los cayucos llenos de niños sin esperanza y las algas que a veces envuelven cuerpos como si de pecios se tratara, en la lengua noto el salitre que me hace escupir blasfemias.

  Pongo a quemar varillas de olor: jazmín, vainilla, canela.. pero siempre se me cuela alguna de incienso que me retrotrae a las misas y los entierros. Los olores de la Iglesia, de blancas casullas y algunas negras almas, de cielos diáfanos y oscuros pecados. Si me concentro puedo ver y oler más la Santidad que la Miseria, pero cada día me concentro peor, se me amontonan los olores y las fragancias, se me confunden con la tufos. 

   Está claro, necesito vacaciones, salir al campo y oler la Naturaleza. Lo prefiero en primavera cuando florece el naranjo y el aroma del azahar inunda mi huerta, excepto si acaban de sulfatar, pero la química de los pesticidas queda poco tiempo en el aire y sólo condimenta el agua, que ya no huele a agua sino a cloro. Ni siquiera las acequias huelen a agua, huelen a acequia, menos mal que suenan como el agua y eso tranquiliza mi espíritu. 

   Me huelo que esto no tiene remedio y me tendré que conformar con los recuerdos a pan recién horneado de mi madre y el puchero, el olor de la vida supongo que cambia con la mirada y la mía se ha ido ensuciando con los años. Confío que mi nieta con su mirada clara, huela el cristalino sabor de vivir y lo disfrute tanto, que sólo los olorosos efluvios de la bondad lleguen hasta su nariz. Siempre nos agarramos al futuro cuando el presente huele a podrido. Si tu también hueles a podrido, piénsalo, quizá estés envejeciendo.


Manu Chao - Clandestino

MALINCHE

miércoles, 24 de julio de 2024

   Tras el éxito sin precedentes del “Mago de Vox”, Nacho Cano emprende ahora una nueva aventura. La obra es fruto de un largo periodo de reflexión, claramente más madura y con un propósito mucho más ambicioso que la anterior. Ha contado con un abultado número de extras venidos del otro continente, son becarios aprendiendo por eso cobran poco. 

    Cuenta con un reparto estelar que nadie podrá tachar de improvisado o de poco profesional, su interpretación es tan loable que no sería de extrañar que sean merecedores de un premio de teatro. 

   Nacho en esta ocasión no pretende ceñirse a la realidad de la historia, sino que va mucho más allá, ahondando en la intrahistoria de los personajes. La crítica podrá culparle de cierto grado de invención y fábula, pero él quiere huir del mito y la leyenda negra para entender la verdadera realidad que asoma bajo su sombra. 

    El personaje principal es el Malinche de  Perro Sanche. 

    No entra en su discurso banal, ni en la traición perpetrada, sino que quiere descomponer su poliédrica personalidad en todas sus facetas. Es narrador de su trayectoria, contada por los demás protagonistas, todos ellos en un alto escalafón del mundo de la escena y la tribuna.

   En el primera acto el protagonista es García Castellón de la Plana, que se ocupó de los inicios de la conquista. Cual Don Pelayo comenzó su batallar contra las hordas rojas imputando a los enemigos de España los delitos que fueren necesarios para limpiar la imagen del Imperio y mantener el pundonor de la Nación. Por su ferocidad, el enemigo no pudo mas que claudicar y retirarse. Liberó de la cárcel a las huestes españolistas injustamente presas por la maledicencia y el desorden. Gente de bien que fue mencionada infames papeles como M. Rajoy, insinuando que podría tratarse del mismo presidente del auténtico gobierno de los españoles, fue oportunamente desestimado. En este acto introduce Nacho un elemento novedoso con una coreografía sorprendente donde la policía patriótica interpreta un número de baile que pone en el escenario más de 60 actores y deja sin aliento al público y a la democracia que asistía de incógnito. 

   Malinche es aquí mero un espectador y va urdiendo su estrategia para asaltar el poder movilizando las tribus amigas, algunas de ellas sanguinarias, aquí las llamaremos Bilduetarras y filoterroristas para que se entienda la obra y el profundo significado que trasciende de este primer acto. 

   El segundo acto también narra las peripecias del mismo protagonista castellonense, esta vez en abierto combate para mantener la España grande y libre, siguiendo el mandato del líder espiritual, el chamán, el gran Manitu, Josemari para los amigos o MAR para otros. Como Escipión es llamado de su retiro por el Senado Romano, para mantener el asedio a la numantina defensa de los bárbaros que quieren romper España. En las batallas Manuel demuestra una estrategia novedosa, que pareciera inspirada en el mismo Señor de los Anillos. La lucha de los héroes de la Tierra Media, junto a los Elfos y los Enanos contra el poder Oscuro de Sauron y él como el mago Gandalf mediante conjuros hechizos y sentencias, vencerá al poderoso enemigo. A veces los magos tienen esa parte oscura, que no son lo que parecen. Como buen musical no falta en esta parte una coreografía, un ballet ruso que interpreta el famoso Kazachok, como solista un bailarín con barretina. 

   Malinche que había depositado toda la confianza y había perdido parte de sus huestes en la liberación de estos facinerosos de la estelada, cariacontecido, asiste al fragor de la batalla que ahora sabe que se acerca a sus murallas. Escribe cartas a su ejercito, les arenga para que la moral no decaiga. Aún no conoce el impresionante giro de la trama que puede llevarle a un desenlace fatal. Entre tanto Sauron y los Orcos gritan desde los campos de batalla sembrados ya de cadáveres. 

   En el tercer acto Nacho lleva magistralmente la acción hasta un desenlace sorprendente. 

   Entra en escena un monstruo de la interpretación, Bien Peinado, viene a resolver definitivamente la batalla y Malinche es su objetivo. Es un auténtico acróbata, un funambulista que camina sobre el filo de la navaja. Tiene detrás un ejército de escribas y valientes patriotas que no dudarán en arremeter contra todos aquellos que traten de someter a los buenos ciudadanos, a los auténticos ciudadanos, los españoles muy españoles. Despliega una estrategia basada en fuegos de artificio que dejará al enemigo aturdido, sorprendido por su osadía y su capacidad de inventiva, con ataques por retaguardia y por los flancos, pero que tienen como objetivo derribar al caudillo (bueno no digamos Caudillo que nos podemos confundir, digamos cabecilla), pues bien viene a asestar el golpe definitivo al líder, que permita a Sauron imponer su dominio sobre la Tierra Media y agrandar su imperio. 

   La escena se convertirá de repente en un número musical de togados, algo nunca visto y que es el perfecto preludio para la apoteosis final. Todos los focos se concentrarán en el paladín de la verdadera esencia de los valores que nos hicieron conquistadores. Ni el mismo Hernán Cortés igualaría en elegancia a este superhéroe Peinado ascendiendo por la pirámide azteca para arrancar el corazón al rebelde y sus adláteres para ofrecerlos en sagrada ofrenda a los dioses. Las cámaras lo quieren y el ama las cámaras. 

   Malinche ve desde lo alto como se acerca puñal en mano y en ese momento se apagan todas las luces. Tras una tormenta de rayos y truenos a base de luces y música heavy metal se ve la lucha final en el vórtice de la pirámide. Puede verse una figura cayendo, pero el autor deja para el público la interpretación de quien se precipita en el abismo. 

   Nacho promete una segunda parte de la Historia porque sabe que Malinche posee un manual de supervivencia. ¿Quién sabe? Esperaremos con ansiedad la próxima entrega. 

   Relato escrito por el ojo de Sauron.

Canción Del Mariachi - Antonio Banderas, Los Lobos • BSO: Desperado

Leer:

"EL MAGO DE VOX"

31 deciembre 2022 


¿QUÉ LES PASA CON LOS NIÑOS?

lunes, 15 de julio de 2024

   Una vez el Papa dijo, cuando la pederastia era el pecado nefando de la Iglesia: “A los pibes ni tocarlos, porque los niños son sagrados". Eso que parece tan elemental para cualquier persona, es sin embargo un asunto pendiente de nuestro mundo. No es ya la desnutrición y la miseria, las enfermedades, una mortalidad tan deshumanizada para un primer mundo cuya mayor epidemia es la obesidad. Las guerras que no son fruto de desastres naturales sino catástrofes cuyos únicos responsables son los malos gobiernos y la ambición. 

    Aunque no todas las muertes de niños son tratadas de la misma manera. En Ucrania la salvajada de la guerra ha provocado la muerte de alrededor de quinientos niños, otros han sido secuestrados por el gobierno ruso y quien sabe que barbaridades pueden hacer las mafias que no tienen moral. Nos parecía tan atroz esa guerra que acojimos alrededor de 200.000 niños con sus madres, nos honra esta acción. Sin embargo, resulta chocante que en los nueve meses que lleva Israel masacrando la población gazatí con casi 40.000 muertos mas de 10.000 niños, nuestros gobiernos no sean capaces de levantar la voz y denunciar al gobierno israelí, imponiéndole sanciones, llamando genocidio lo que es una matanza sin piedad. Los niños se convierten en cifras que no paran de crecer y no mueven ni conmueven las conciencias de los gobernantes para no perjudicar la geopolítica, al parecer, mucho más importante que los niños. 

   En nuestro país 6.000 niños crean una crisis migratoria. ¿En serio que somos capaces de acoger más de 200.000 ucranianos (también lo hicimos con los afganos hasta que los telediarios dejaron de hablar de ellos) y dar amparo a esos menores resulta un problema tan grave? No es sólo el hecho de la falacia en sí, en una ciudad como Madrid con más de 4,5 millones de habitantes, 500 niños serían un problema menor que mantener el Zendal. 

    Que después de reuniones al más alto nivel con las comunidades accedan a repartir 347 niños, me parece tan ridículo que no lo soporto. Sabiendo además que el año anterior tampoco se cumplieron los “cupos” del reparto. Me ofende esta falta de solidaridad, no ya únicamente por convertir una obligación moral en un problema de Estado, sino por el lenguaje utilizado. Nombrar a los niños como MENAs, asimilar su presencia con la delincuencia y el terror, es tan despreciable que me espanta quien lo pronuncia. Sugerir siquiera que debemos de mandar a la Armada a hundir pateras, defendiendo las fronteras, como si la invasión bárbara estuviera a las puertas de nuestras murallas, es de cerebros medievales, de mentes retorcidas, de gentes sin ningún escrúpulo ni moral. La aceptación del reparto provoca una crisis en Vox y me entra la risa, es un esperpento que quieran mantener 6000 niños en condiciones inhumanas para diferenciarse de su socio. Lo del PP me deja sin aliento, unos días son MENAs y enviamos fragatas y otros dicen no renunciar a sus principios. Estaría bien saber si en sus principios entra dar solución a un problema que afecta a menores, sobre todo en una comunidad donde ellos mismos forman parte del gobierno. 

   Los niños son nuestra esperanza, España tiene una tasa de crecimiento negativa, la peor natalidad de Europa, la edad media del primer hijo en las mujeres es de 32,5 años, hay 7000 partos menos cada año y eso contando que nuestra natalidad mantiene tasas gracias al nacimiento de hijos de mujeres inmigrantes. ¿Qué nos pasa? ¿De verdad no lo vemos? Si no vienen niños, los enseñamos, los hacemos crecer en nuestro país y les damos un trabajo, nos perderemos el futuro, estaremos condenados a desparecer.

   Es fácil gritar en el partido de Inglaterra-España : “Yo soy español, español… “ cuando marca el gol el hijo de un inmigrante, y un menor como Lamin Yamal se convierte en un astro del balón. Él si nos representa, pero los otros no, porque todavía no saben jugar bien al futbol, pero quizá nos estemos perdiendo un filósofo, un científico, una mente brillante que nos saque de nuestra imbecilidad y de nuestro pobre futuro si nos quedamos sin niños.




BAJO EL IMPERIO DE MI LEY (no Milei)

sábado, 6 de julio de 2024

   Nos dimos una democracia para vivir bajo el imperio de la Ley. Los parlamentos, el poder legislativo, es el encargado de elaborarlas y su composición la decidimos con el voto. El poder judicial aplica la norma con equidad e imparcialidad. Esta es la maravillosa propuesta que nos brinda la democracia. Parece un círculo perfecto, pero su error esta como siempre en su gestión. 

 No todos los ciudadanos van a estar contentos con los gobiernos salientes de las urnas. Es lógico que los que no les votaron sientan una frustración, pero podrán cambiarlo en un futuro. Las ideas, los hechos, las políticas de los gobiernos hacen que los ciudadanos renueven su confianza o la pierdan. No quiero ponerme poético porque aquí también se pierde parte de esta aureola de gracia que parece envolver el proceso. La manipulación del voto no la inventaron ayer y no es propia de nuestro país, pero al final, los gobiernos nefastos probablemente tendrán sus días contados. Este es el mecanismo que regula la acción gubernativa, nosotros y nuestro voto. 

   El segundo poder, aquel que desde el estrado interpreta la Ley, lo constituyen los hombres y mujeres del Derecho. Imagino que están obligados a una especie de juramento hipocrático donde su ejercicio mira por la beneficencia del reo, la confidencialidad y la veracidad, el respeto a la Ley y su aplicación con jurisprudencia (la palabra es en sí bastante ilustrativa). 

   Honestamente me da vergüenza el espectáculo que desde la judicatura se da a la ciudadanía. Pretender que se confié en la institución cuando se ha mantenido hasta el hastío la caducidad del CGPJ, asistir cada día a sentencias claramente injustas e injustificables para el más simple de los mortales, retorciendo desde la magistratura los conceptos, inventando argumentos inverosímile, da bastante pena. Desde hace tiempo asistimos impotentes a un ejercicio de la Justicia con sesgos claramente políticos y sirviendo a los propósitos de la política y no de la Ley. Titiriteros encarcelados, acosos a políticos, acusaciones infundadas que persiguen un fin puramente político, policía patriótica  a la orden del gobierno, absolución de corruptos, cierre de causas inauditos, apertura de diligencias sobre procesos delirantes (tramas rusas, terrorismo...) Todo ello sin asumir responsabilidades NADIE, ni siquiera apercibimientos de instancias superiores que deberían velar por el correcto funcionamiento de la Justicia.

   Sería injusto meter en el saco a todo el colectivo. Hay seguro cientos de jueces escandalizados por esta deriva de opera bufa en que otros colegas han convertido los estrados. Algunos togados han interpretado los papeles más ridículos, incorporándose al circo mediático que los alienta y respaldando tesituras de políticos que lejos de ser servidores, son o pretenden ser autócratas. "El que pueda hacer que haga". 

   Me da pena decir que no creo en la justicia como institución porque la veo corrompida por el interés político y personal de determinados magistrados. 

   La interpretación de la Ley es sin duda un precepto de los jueces, pero la manipulación torticera de los argumentos es impropia de personas que representan a la Justicia. Puede no gustarles la Ley, como puede no gustar a otros ciudadanos, pero la Ley es una norma emanada desde el Parlamento elegido democráticamente, no tienen autoridad moral para convertirla en SU ley, en la que ellos consideran que debería haberse promulgado. 

   Tenemos un problema. Así como hay sistemas de control para las conductas no adecuadas en cualquier profesión, la judicatura goza de una impunidad manifiesta, incluso hasta en las sentencias más extravagantes, no hay consecuencias. Hemos visto perseguir y destruir políticos con procesos que no han sido más que humo mediático, amparado por jueces que nunca han dado cuenta de sus errores o de sus connivencias. Ignorar evidencias que cualquier idiota reconocería sin sonrojo, llámese M. Rajoy u otros, sin tacha para el juez que lo sostiene.

   Más allá de las voces que se levantan dentro de la propia judicatura criticándolas, que no dejan de ser opiniones particulares sin valor punitivo ni corrector, cuando las criticas vienen desde otros ámbitos se ven como injerencia en su independencia interpretativa, se les tacha de ataque al Poder Judicial. No es verdad, criticar actuaciones judiciales debe normalizarse como ejercicio de la libertad de expresión. Ni los jueces tienen la verdad absoluta, ni poseen un estatus divino de infalibilidad, ni son ajenos a las influencias, intereses personales, incluso a la corrupción. 

   Creo que la institución se ha acantonado en la creencia de que la Ley les pertenece y son los únicos garantes de la Verdad. Ahora vivimos bajo el imperio de SU Ley, nadie puede enmendar sus sentencias y cuando eso ocurre hay un levantamiento general que descalifica al emisor. 

   La Ley puede que emane del pueblo, pero los exégetas que la interpretan no siempre representan al pueblo que las promovió.

 

Leer:

Romanza del titiritero

14 febrero 2016 


HYBRIS

sábado, 22 de junio de 2024

   Hybris es un concepto que se remonta al teatro griego, aludía a los actores que se excedían en su papel, para convertirse en los protagonistas. En la mitología se refería al castigo para los que sobrepasaban los límites de su humanidad y se creían divinos. Prometeo fue castigado con la hybris por robar el fuego a los dioses y dárselo a los humanos, fue encadenado y condenado para que un águila comiera su hígado cada noche. Zeus para vengarse de los Hombres creó a Pandora que abrió la caja de las desgracias humanas . 

   Hybris es la desmesura, la arrogancia de sentirse un dios, de creerse el Elegido. Es la prepotencia, el orgullo desmedido, la soberbia de quien cree que es único, que es especial y eso le da derecho a menospreciar al otro, de tratar de someterlo, de humillarlo. Es la osadía del que tiene el poder y se cree invulnerable e impune. 

   David Owen, neurólogo y miembro de la cámara de los lores en su libro: “El poder y la enfermedad” definió el síndrome de hybris para describir a los mandatarios que imponen su criterio porque se creen infalibles y son impermeables a la crítica. 

   ¿De qué me suena todo esto? 

   En verdad, la Historia es una ruleta que gira sin descanso, que repite incansablemente los mismos pecados, las mismas miserias. No sé si es la edad, pero veo a menudo ese síndrome de hybris. 

   Algunos son seres inviolables ante la Ley, que por un mandato constitucional quedan al margen de la misma y como si descendieran del mismo Olympo son invulnerables a la Justicia. Otros son súbditos aupados al poder que se otorgan facultades de líderes indiscutibles, piensan que son salvadores y no servidores. Son individuos o personajes, que adquieren la facultad de matar y ordenar matar porque se sienten impunes, creen que con ello protegen a su pueblo. Son ajenos a la moral, la guerra no es más que un remedio a los males que ven a su alrededor y que ellos vinieron a erradicar. Destruyen sin miramientos, ejecutan sus planes sin mirar a los ojos de los muertos, para ellos son objetivos deshumanizados. No importa el hambre, la destrucción, la soledad, la orfandad, sólo son efectos secundarios de su medicina. Son ciegos sin escrúpulos, malvados con espíritu mesiánico en que únicamente reconocen su verdad. Cualquier argumento racional es inválido contra su Credo, no hay límites en su acción hasta que consiguen su trono o hasta que se hunden con él y los suyos. Los vemos reunirse rodeados de banderas, con desfiles militares, con niños que les traen flores, haciéndose regalos, imponiendo cruces, medallas, aceptando galardones inmerecidos que pagan los otros, haciendo proclamas de sus virtudes, loando al amigo que quizá en el futuro recibirá el puñal de su mano. No piensan en la Verdad, en los Derechos Humanos, en la infancia destruida. No pueden pensar más que en sí mismos y su ascenso a lo más alto. Son narcisistas peligrosos, seres dañinos. Son amenazas reales para la vida. Están ahí, a veces nosotros mismos los pusimos en su sillón, les otorgamos el poder. Dijeron que eran demócratas y les creímos. Les dimos los votos, le investimos con títulos y cuando están arriba nos convertimos en su diana. Ensucian el entorno, escupen en la mano que les ayudó. Gritan libertad y preparan los grilletes, piden solidaridad mientras roban la caja, hablan de respeto con insultos y ofensas, defienden la mentira con argumentos falaces. Han infestado las tribunas, han poseído los medios de comunicación que fabrican sus mentiras, manejan como títeres las togas para defenderse y sostener sus acusaciones. 

   Me siento rodeado de enfermos, Aznares, Zaplanas, Ratos, Ayusos, Mileis, Putins, Netanyahus, son reencarnaciones de otros que les precedieron y predecesores de los que vendrán si no los remediamos. 

   Némesis es la diosa de la justicia divina, la que hace pagar los daños. Es posible que a cada villano le espere su némesis, pero por si acaso la Justicia Divina es tan ciega como la Humana, queda bajo nuestra responsabilidad derribar a los malvados, evitar que se exhiban, impedir que se aúpen al poder o estaremos irremediablemente condenados a soportarlos. Nuestras armas la crítica y el voto.


IDIOCRATAS

lunes, 3 de junio de 2024

   Los demócratas son una especie evolutiva o involutiva, según se mire. La democracia nació para sustituir a los autócratas, a los tiranos, el gobierno de un líder cuyo mérito era su crueldad para con los enemigos o su ascendencia, divina o pagana pero directamente asignada por nacimiento. Los reyes vinieron a ser derrotados por los aristócratas, el gobierno de los mejores según Platón. Los padres de la patria, patriotas de noble cuna que demostraron no ser más que nuevos reyes. Con la Revolución francesa creímos que nacía la verdadera democracia participativa y el gobierno quedaba en manos del pueblo. Depositamos nuestro voto en manos de los burócratas y en los tecnócratas porque  suponíamos que ellos tenían el saber de manejar los asuntos de Estado y de la Economía, pero han sido de nuevo un fracaso. Cada modelo ha ido creando nuevos espejismos que han resultado ser niebla y desierto. 

   Ahora que la política la administran seres corrientes, algunos sin carrera ni méritos (ni la meritocracia que airean como estandarte puede darles credibilidad), ahora que los simples mortales han ascendido a la cúspide del poder, podemos ver en ellos nuestras propias carencias. Se comportan como idiotas, como títeres de un teatrillo, que no es más que lo que su pueblo les anima a hacer. Nosotros también interpretamos el papel de idiotas aplicados y nos dejamos llevar por los eslogan, la propaganda pagada, las consignas de partido y todo el ruido mediático que acompaña las elecciones y que al final decide nuestro voto.

   Aquí estamos en los albores del triunfo de los que niegan la democracia aupados por los idiócratas que copiamos la Historia pasada como monos adiestrados. Nos auto convencemos que repitiendo el gesto del voto contribuimos a construir un mundo civilizado, pero la realidad nos da de bruces con la verdad, por doquier abundan los abascales, ayusos, trumps, netanyahus, mileis que nos llaman imbéciles mientras sonreímos embobados ante la pantalla y preparamos la papeleta.

Leonard Cohen - Dance Me to the end of Love ...


LLEGAMOS TARDE

domingo, 12 de mayo de 2024

   Llegamos tarde a casi todo, a pesar de que nuestras experiencias previas deberían advertirnos de los peligros del retraso en las decisiones. Hemos llegado tarde desde el comienzo de la Historia. Somos procrastinadores habituales, tendemos conductas evasivas sobre nuestras responsabilidades éticas y sociales, por comodidad, por conveniencia, por miedo, por inseguridad, por manipulación o por una combinación de todas ellas. 

   Hemos llegado tarde a darnos cuenta de que los 35.000 muertos gazaties, niños y mujeres, civiles, no son una respuesta equilibrada, no es un acto de defensa, es claramente un programa planificado de destrucción, de aniquilación, un genocidio. Llegamos tarde a poner cota a la represión israelí sobre el pueblo palestino, obviando que la represión genera odio y el odio lleva al terror. 

   Llegamos con retraso a la Democracia y cuando despertamos de ese letargo, no desenterramos los muertos ni hemos sabido enterrar las luchas cainitas. Llegamos tarde a entender que los mensajes xenófobos y racistas, los nacionalismos excluyentes, los discursos patrios, engendran tormentas de consecuencias impredecibles. Los judíos lo saben, lo sufrieron en el holocausto donde muchos ciudadanos cerraron los ojos ante lo que se venía. Estamos llegando tarde a desterrar esos mismos discursos que se imponen a nuestro alrededor y en entornos más lejanos. 

   Llegaremos tarde otra vez a pesar de que los jóvenes levantan su voz y nos advierten. Tarde para el cambio climático, tarde para el hambre en el mundo, muy tarde para equilibrar la distribución de la riqueza, tarde para la justicia universal, tarde para el control del uso de las armas, de la intoxicación informativa… 

   El remordimiento y el reconocimiento de la culpa no expía el pecado de la inacción, de la indolencia, de la desidia. Seguiremos cargando con la responsabilidad de haber sido ciegos a la evidencia, negligentes, indiferentes o simplemente neutrales. 

   Por favor detengamos de una vez la barbarie.

Guns N' Roses - November Rain


LA PENA O LA PANA

sábado, 27 de abril de 2024

   No tenía Pedro el corazón de piedra y como el más humilde de los humanos sucumbió a la infamia. Por amor, por cansancio, porque la ofensa incesante, como la gota malaya produce hastío. Porque la iniquidad con que se ha tratado su figura ha sido suficiente para quebrar su resiliencia que parecía indestructible. La pana del socialismo parecía tan sólida, tan a prueba de balazos, de injurias y agravios, que todos confiaban en su invulnerable naturaleza. Nada dura para siempre, todo lo vivo tiene la muerte en su esencia, como decía José Hierro. 

   No es el primero sufrir el castigo, lo precedieron muchos otros. Hemos cerrado los ojos tantas veces ante ajusticiamientos públicos a manos de los que no cometen pecados, son los predicadores de la Fe. Los hemos visto sucumbir bajos las piedras de sus sentencias, de sus titulares, de sus acusaciones infundadas. Es una estrategia tan antigua y tan sucia que no sé cómo aún nos sorprende. Mónica Oltra, los titiriteros acusados de terrorismo, Casandra encausada por un chiste sobre Carrero Blanco, Pablo Iglesias acosado por los fascistas en su casa, inventando cuentas y casos que han sido desestimadas, el terrorismo desenterrado para acusar al Procés. Todos sufrieron el descrédito y pagaron injustamente por acusaciones que resultaron falsas, pero que no eran fortuitas, eran fruto de estrategias políticas para vencer en la batalla del poder a costa de cualquier precio. Es posible que Pedro ya sospechase que un día él podría ser la víctima, se lo dijeron. Él también calló cuando lo hicieron con otros. 

   No considero que ninguno de los mencionados, ni otros que han sido enterrados por la vileza de quien ve en la mentira un arma, sean más importantes, pero la carta de Pedro Sánchez ha despertado los miedos. Un presidente elegido democráticamente puede dimitir por un asunto que con mucha probabilidad no será más que humo. Su carta ha desenterrado los muertos de antes, ha despertado el fantasma de un golpe de estado encubierto. No son los guardia civiles con bigote y tricornio entrando brutalmente al Parlamento, es algo más sibilino. Los medios instigando, inventando titulares, gritando desde sus altavoces consignas abyectas, las togas asintiendo, dando pábulo a la maledicencia de sindicatos del crimen, de conocidos delincuentes cuyas conocidas prácticas oscuras ahora resultan pertinentes. 

   No me da pena Sánchez, quizá obtenga la paz renunciando a su posición, es posible que sea más feliz fuera de la cruenta y sucia lucha política. Su decisión sólo le pertenece a él, pero tiene importantes consecuencias. Si logran subvertir el mandato de las urnas con falacias, no sólo habrán destruido a la persona, habrán pervertido el sistema, habrán anulado la Democracia. No veo tregua en esta batalla, como Netanyahu en Gaza, no tendrán piedad con nada, pretenden aniquilar sin miramientos. 

Y todo pasa, y nada 

que sea nuestro dura. 

Todas las cosas llevan

 dentro de sí su tumba. 

              José Hierro

 

Leer:

¿Quién juzga al juez?

23 septiembre 2018 


TIEMPO DE SILENCIO

lunes, 8 de abril de 2024

   En el tiempo del ruido, del caos, de la mentira, de la hipérbole, de las bombas y los gritos por el hambre, también hay un tiempo de silencio. Silencio para honrar a los muertos, a todos ellos. Un tiempo para el respeto a su memoria silenciosa, para el recuerdo de sus vidas entregadas al trabajo, a sus familias. Es necesario detener el ensordecedor estruendo de la vida para honrar a la muerte, para dejarla hacerse presente y que nos hable: “memento mori”. Para que nos consuele en que no desaparece la vida con el cadáver, sino que pervive en la memoria de los que compartieron su existencia. Por muy anónima que haya sido una vida, por muy aparentemente anodina, toda persona ha construido a su alrededor una red de afectos, un grupo humano de seres queridos que mantendrán en la memoria su paso por el mundo, la huella permanecerá hasta que finalmente el oleaje del tiempo la borre. 

    Sería mucho pedirle al mundo que la hiciera imborrable, si incluso para los genios y los malvados que permanecen en la Historia, su recuerdo no es más que una nota a pie de página que no va unida a ningún afecto. Sólo el amor hace que esa huella rompa el silencio del olvido y haga presente al ausente, la memoria se convierte entonces en una luz que devuelve el hálito y la palabra al muerto y lo hace regresar del Hades como Orfeo. Sólo el amor, y con eso basta. 

   A mi padre que murió esta madrugada.


EL FUTURO INEXISTENTE

domingo, 31 de marzo de 2024

   En la primavera de la vida, en los albores de la percepción de la existencia soñamos con el futuro. Bajo el árbol sin sombra se construyen planes imaginarios, se relatan proyectos inciertos, se espera ver crecer en sus ramas los frutos que quizá nunca maduren. Caminamos el camino con un rumbo que creemos nos llevará al destino soñado, pero sin brújula, sin mapa, sin luz que alumbre la senda en la oscuridad de la noche, ¿Quién sabe dónde nos lleva? Vemos el futuro preñado de sueños convertidos en realidad, proyectos acabados, esbozos de vidas de otros adaptadas a nuestros deseos. El futuro es lejano y de luz, brilla como un faro que señala las costas del mar impulsivo, las rocas donde rompen sus olas. Es confianza, certidumbre, credulidad. 

   En el verano del tránsito hay futuros agostados por el calor, por el inclemente y sofocante esfuerzo, por la sequía pertinaz de agua de vida. Hay árboles que han empezado a madurar sus frutos y otros que merced a la calima y el poniente, muestran sus hojas marchitas y secas, arrugadas como viejos prematuros. En los otros se sonrojan las mejillas de sus cosechas, endulzando su materia, conteniendo las semillas que prometen nuevos futuros esperanzadores. 

   El otoño es un tiempo a veces triste, siempre gris por sus tonos, con días de sol cubierto o nubarrones que anuncian la tormenta. En ese tiempo se mira el futuro con desgana, con la pereza y el miedo que imprime lo desconocido, lo incierto. El hombre que entreabre apenas los ojos para ver y no ver, para escrutar la dirección del golpe que la vida le guarda. Es el hombre frente al abismo, la sima abierta delante de sus pies y que irremediablemente tendrá que cruzar para seguir el camino. El futuro, insondable para los adivinadores, para las sibilas del oráculo, un devenir impredecible, una oscuridad que acecha, un monstruo que devora nuestros sueños, los que dimos por muertos o los que sólo fueron una imagen fugaz. El futuro es un tiempo de desesperanza porque la fe se perdió en el camino plagado de baches y piedras, de desengaños y certidumbres perdidas. Es un tiempo empañado por el pasado, irremediablemente pretérito y añorado. Un devenir inalcanzable tan cercano y tan esquivo, tan deseado como temido, modulado por el humor del presente que tan a veces emborracha como entristece. 

   Desde el invierno se ve el futuro como siniestro. El hombre ya cercano a las sombras, percibe el olor de la sepultura, el roce de la parca. Difícil sonreír a la ineludible vuelta a la nada, dar por concluido el tránsito. Mirar a los ojos del vacío y pensar: lo hecho, hecho está y lo inconcluso quedará para siempre inacabado. Afrontar la finitud, el recuerdo como existencia, el amor como presencia, las cenizas como toda corporeidad, es un reto para sabios y profanos, para pobres y soberanos, para creyentes y ateos. Nada es tan oscuro como el presagio de la muerte, nada puede compararse al desánimo por vivir, al último hálito que se exhala sin saber si será verdaderamente el último, pero que ya no importa que lo sea. Sólo agarrado a la esperanza de que más allá del presente fugaz exista un futuro figurado. Negro invierno preñado de negros pensamientos. 

   ¡Ábrete a la verdad! 

   El futuro es un tiempo inmaterial, inexistente, ficticio, pensado pero irreal, aunque a pesar de su etérea incorporeidad, es tan presente que marca nuestra vida más que el propio presente. No existe el futuro como no existe el pasado. Lo que pasó no forma más que parte del ahora a través del recuerdo y la emoción. El futuro no es más que una ensoñación, una nube de posibilidades construidas con la ambigüedad de lo posible o lo deseable. La única realidad es el presente, el ahora, ni siquiera el segundo atravesado merece ya atención, como no la necesita el segundo que vendrá. La vida vivida minuto a minuto con la certidumbre de su finitud y su inmensa fragilidad, pero con la incomparable belleza del momento vivible puede constituirse en el motor de la felicidad. Disfrutar de la eternidad del instante.

Pedro Pastor ft. La Muchacha - Sacar La Rabia



LA LIBERTAD Y OTROS DEMONIOS

jueves, 21 de marzo de 2024

   Libre albedrio, libre comercio, libre mercado. Veo como la libertad revolotea a mi alrededor llenando de color la vida. Cada noticia aparecida en televisión o escuchada en los noticiarios radiofónicos destila libertad. La libertad de los fondos buitres para desahuciar a los impagados, a los morosos, que eran libres para haber depositado lo que se les exigía. Una juventud tan libre y tan informada, libres de irse de casa, pero en su libertad optan por el statu quo de quedarse con los padres. Los progenitores henchidos felicidad y en plenitud de sus responsabilidades deciden mantenerlos sine die a pan y mantel libremente. 

   Libertad de pensamiento, libertad de prensa. Todo aquello que deseamos saber está a nuestra disposición a golpe de click. Verdades o mentiras, porque quien escribe, quien habla, es libre de ser veraz o falsario. Envueltos en este clima de incertidumbre libertaria vivimos con la alegría que confiere estar en un mundo casi perfecto de libertades y derechos. El derecho a defenderse hace que libremente se pueda optar por asesinar inocentes, sin que ello reste ni una pizca de credibilidad al asesino. El respaldo a la libertad y su defensa debe ser tan radical que no se pueden atender escrúpulos o tener reticencias en los métodos por despiadados que parezcan. Siempre estará el bien común de la sacrosanta Libertad sobre ellos. 

   Constituciones libres e intocables, tribunales libres e intocables, políticos libres e intocables, reyes inimputables, papas infalibles, pobres que eligieron su pobreza en ejercicio de su libertad y ricos que mantienen su estatus gracias al libre mercado, comisionistas avispados, corruptos libertarios. Nada hay como una sociedad libre hasta en su autodestrucción. Moralistas que pretenden dirigir su destino, no son más que autócratas que atentan contra el sagrado bien de la libertad colectiva. 

 ¡Dejad que los ciudadanos voten libres! ¡Que elijan libremente a los ineptos! ¡Fin a la tiranía de la inteligencia y la lógica! Libertad sin ira, Libertad divino tesoro. Palestina Libre.



CORRUPTIO INTERRUPTUS

domingo, 3 de marzo de 2024

   La corrupción, nuestro pecado, nuestro sino. ¿Acaso está en nuestra genética mediterránea o forma parte del ser humano y no es intrínseco a nuestro carácter latino? La novela picaresca española no hace referencia a esta clase de individuos. El pícaro en sí es un listillo, un espabilado con poca vergüenza, que más por necesidad que por maldad comete alguna tropelía. Cuando hablamos de la corrupción está implícito cierto grado de descomposición moral, de degeneración en el comportamiento, que entraña vileza y maldad. 

   No estoy seguro de si la sociedad actual crea más corruptos, pero me inclino a que es posible que así sea. Nuestro sistema económico persigue el enriquecimiento personal como objetivo, el ascenso social que posibilita acceso al poder, al medrar se concibe la idea de superioridad moral o intelectual, ostentar un estatus superior produce una especie de miopía que impide ver a los otros como individuos de idéntico derecho. Finalmente existe una percepción de impunidad inherente creer  tener el control total. Estamos rodeados de ejemplos que nos ilustran estos comportamientos. 

   La más repugnante posiblemente es la corrupción de menores. Sabemos que ha sido una lacra constante a través de los tiempos y la única diferencia es que hoy es más pública y por tanto más perseguida. Abominamos por igual de estos despreciables individuos. Pero nada llena tantos papeles como la corrupción política. Siempre nos quedará un Barcenas o ahora un Koldo que nos demuestra que la avaricia lejos de ser un pecado capital, es un dejà vu repetido ad infinitum. 

    No nos sorprende, eso es lo más triste, casi lo esperas. Ninguna legislatura sin su granito de porquería. No llega a producir ni asco ni repugnancia, sólo un cierto hastío por lo cansino del guion. Un pelanas o un dandi, un lacayo o un rey, el tesorero de una empresa o el banquero del Papa, tanto da. Llegan a una posición de poder y lo ejercen para enriquecimiento personal o de sus socios y familia. Digo que no me producen más sentimientos que la pena por nuestra especie, no siento lástima por ellos, por supuesto me alegro de su descrédito. No espero grandes condenas judiciales porque ya sabemos que la Justicia es ciega y tiene peor vista cuanta más riqueza acumula el reo. El sentimiento de tristeza que me genera es más por la hipocresía que lo rodea. Un fariseísmo que enrojece la inteligencia. Los pecadores más flagrantes se convierten en doctos moralistas. Quien cerró los ojos ante la suciedad que pisaba, ahora se escandaliza de la roña del vecino. Después de lo que hemos pasado en un futuro no muy lejano, escuchar de los que callaban, pedir luz y taquígrafos, oír cómo se rasgan vestiduras por no asumir responsabilidad in vigilando causa cierto grado de rubor. El cinismo es superlativo cuando se utiliza para enredar y perseguir fines espurios. El corrupto deja de ser el objeto para rodearlo de otros posibles corruptos que tapen su corrupción con otra mayor. No importa que el indeseable page por sus delitos, lo importante es conseguir que caiga el enemigo, en su totalidad, que se rinda, que se humille, no importa lo que resulte dañado si el fin es el deseado. Nosotros meros observadores boquiabiertos, asentimos ante las pruebas ciertas o inventadas para la ocasión. 

   En este podrido sistema hasta las togas resultan manchadas. Los que absolvieron corruptos, desimputaron ladrones, eximieron delincuentes y condonaron sus condenas, ejercen de jueces de la verdad absoluta. En su docta jurisprudencia mantienen secuestrada la Justicia, nos ilustran con nuevos conceptos perifrásticos que convierten en terrorismo el uso de extintores o carritos de equipaje, poniendo al nivel de los que utilizan explosivos. Los disparates son tan patéticos para los que celebramos el fin del terrorismo de ETA, que si no fuera por la pena estallaría en una risa incontenible. El descredito de la Justicia es tal que no comprendo como no genera dentro de la judicatura el vómito y la denuncia. 

   Dejemos de enredar, quien haya robado que devuelva lo sustraído y pague su delito. Llamemos por su nombre al que se corrompe, terrorista al que produce terror, juez al que imparte Justicia y político al que dedica su esfuerzo al servicio de la res publica. No dejemos de llamar a las cosas por su nombre, lo de Gaza no es derecho a la defensa es un genocidio y son crímenes de guerra que pesarán en nuestra conciencia y en la Historia. 

Lo que puede el dinero 

(Juan Ruiz Arcipreste de Hita ) 

 

Hace mucho el dinero, mucho se le ha de amar; 

al torpe hace discreto y hombre de respetar; 

hace correr al cojo y al mudo le hace hablar; 

el que no tiene manos bien lo quiere tomar. 

 

También al hombre necio y rudo labrador 

dineros le convierten en hidalgo doctor; 

cuanto más rico es uno, más grande es su valor, 

quien no tiene dinero no es de sí señor. 

 

Y si tienes dinero tendrás consolación, 

placeres y alegrías y del Papa ración, 

comprarás Paraíso, ganarás la salvación; 

donde hay mucho dinero hay mucha bendición. 

 

Él crea los priores, los obispos, los abades, 

arzobispos, doctores, patriarcas, potestades, 

a los clérigos necios da muchas dignidades, 

de verdad hace mentiras, de mentiras hace verdades. 

 

Él hace muchos clérigos y muchos ordenados, 

muchos monjes y monjas, religiosos sagrados, 

el dinero les da por bien examinados, 

a los pobres les dicen que no son ilustrados. 

 

Yo he visto muchos curas en sus predicaciones 

despreciar al dinero, también sus tentaciones, 

pero, al fin, por dinero otorgan los perdones, 

absuelven los ayunos y ofrecen oraciones.


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